miércoles, 21 de marzo de 2007

Conciertos de llantos nocturnos

Ayer volví a quedarme a dormir en el Hospital.

Como ella tiene menos de 2 años, estábamos en un lugar destinado para los más pequeños (había muchos carteles que ponían "lactantes"). Nosotros, como la enfermedad era contagiosa tuvimos la suerte de tener un cubículo individual, que aunque era pequeño, por lo menos permitía cierta intimidad. Casi todas las demás habitaciones eran para 3 cunas.

Al lado de cada cuna disponen todas de un sillón reclinable en el que se supone que tiene que pasar la noche el adulto acompañante. La solución del sillón reclinable es curiosa, porque no es precisamente cómodo para pasar en él una noche. No creo que les fuese a salir más caro tener un sillón que pudiese convertir en cama. Igual es que no quieren que los familiares estemos cómodos. Lo cual puede tener su justificación con enfermos más grandes, pero con niños de menos de 2 años...¿pretenden que los dejemos solos?

Pero el título del artículo es porque en el hospital tienen la costumbre de hacer una ronda a las 12h y otra a las 6h para dar medicinas a los niños, revisar cosas, etc. Y la verdad que no ponen especial cuidado en hacerlo sigilosamente...resultado, unos quince minutos en los que todos los bebés acaban llorando sobresaltados.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Espero que tu niña este mejor...Hace un tiempo tuve una situacion similar y me toco "disfrutar" del sillon que mencionas....y no se a ti, pero a mi lo que tambien me despertaba eran las enfermeras con sus risas y sus juegos de parchis (no especialmente silencioso)...yo creo que a veces se olvidan de que los pacientes y sus familias son humanos y los tratan como nosotros a nuestros PC: elementos del trabajo.

Un saludos, y una pronta recuperacion para la chiquitina.

Cristina