El libro contiene un montón de curiosidades sobre las diferencias culturales internacionales. Aunque algunas cosas pueden ser estereotipos, el libro tampoco es excesivamente simplista y creo que no intenta ridiculizar, sino simplemente señalar esas peculiaridades.
Tal y como dice el propio autor:
Sin duda alguna, en un día no muy lejano viviremos en un mundo que será el equivalente global de un vía principal británica contemporánea, tristemente uniforme y anodina. Entonces este libro será un curioso recordatorio de los días pasados. Mientras tanto, nuestro planeta continúa siendo un lugar vasto y extraordinario, y este libro no es más que una modesta introducción a sus peculiares y variados comportamientos.
Según mi experiencia, una de las mejores cosas de viajar es la posibilidad de encontrar gente de países y costumbres diferentes, pero con los que se puede encajar y encontrar más similitudes que con gente de tu mismo barrio.